México, D.F. / Febrero 14.-
La brecha entre la productividad laboral y salarios reales ha tendido a ampliarse en México y el mundo en los últimos 10 años, advirtió Manuela Tomei, directora del Programa sobre las Condiciones de Trabajo y Empleo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La especialista consideró que “la riqueza generada está tendiendo a favorecer más las utilidades de las empresas o ganancias de capital que los salarios de los trabajadores, con lo que se reduce la participación de los salarios en el ingreso total”.
“Es decir, que las empresas han sido favorecidas mucho más que los sueldos”, lo que contribuye a una moderación salarial, una menor capacidad de consumo y mayor ganancia para las empresas, señaló Tomei.
Para Enrique Dussel Peters, coordinador del Centro de Estudios China-México de la UNAM, hay un gran espacio para aumentar los salarios reales y por cuestiones de política económica no se ha hecho.
“Hay aumentos muy sustantivos en la productividad, pero en el mejor de los casos los salarios se mantienen con ligeros aumentos”, indicó.
Consideró que en México sigue imperando el mito de que si se aumentan los salarios se genera inflación. “Es un argumento falaz para México y el mundo, lo están demostrando China, Brasil, donde en los últimos seis años de Lula el salario real se duplicó en dólares y se ha controlado la inflación”, dijo.
De acuerdo con la OIT, en la última década se observa una creciente desigualdad salarial, que se caracteriza por el rápido aumento de los salarios más altos y un estancamiento en las partes mediana e inferior.
Discussion about this post