México, D.F. / Marzo 28.-
Con un programa integrado por composiciones de Ludwig van Beethoven y Gioachino Rossini, este fin de semana, la Orquesta Filarmónica de la UNAM y el Coro de la Fundación Príncipe de Asturias ofrecieron dos conciertos en la Sala Nezahualcóyotl.
La interpretación de la OFUNAM y el coro de la Fundación española, dirigido por José Esteban García Miranda, estuvo acompañada por los solitas Elisabeth Strid (soprano), Guadalupe Paza (mezzosoprano), José Luis Ordóñez (tenor) y Alexander Teliga (bajo).
Bajo la batuta de un director huésped, el griego Ivan Anguélov, el conjunto sinfónico más antiguo de la ciudad de México, abrió el concierto con la obertura de “Fidelio”.
Esta ópera, única del célebre genio alemán, narra la historia de Leonora, una mujer heroica y fiel que se disfraza de hombre y se hace pasar por Fidelio para rescatar a su esposo Florestán de la prisión en la que ha sido encerrado injustamente por el malvado Pizarrao.
Pese a que en su estreno en 1805 en uno de los teatros más importantes de Viena, esta ópera fue mal acogida por la crítica; la historia que narra resultaba significativa para Beethoven porque, decía, representaba una combinación muy atractiva de la lucha del ser humano contra la tiranía y el estado ideal del amor conyugal.
Posteriormente, la Orquesta y el coro invitado interpretaron Stabat Mater. Esta secuencia lírica del italiano Gioachino Rossini, forma parte de la inconformidad que durante los siglos XVII y XVIII mostraron los músicos de la iglesia, quienes, como resultado de una búsqueda creativa que pretendía ir más allá de las composiciones aprobadas por la iglesia, escribieron nuevas obras. Las 10 piezas que conforman Stabat Mater refieren a un poema devocional basado en una concepción espiritual de la pobreza que describe la vigilia de la Virgen María ante la cruz.
El entusiasta auditorio de la sala pudo conocer el significado de esta obra escrita en latín medieval a través de los subtítulos exhibidos en una pantalla al fondo del escenario.
La Fundación
Además de los dos conciertos ofrecidos en la sede de la OFUNAM, durante su estancia en México, el coro de la Fundación Príncipe de Asturias, formado en 1983, amenizó la recepción que el embajador de España en México, Manuel Alabart, ofreció en su residencia en honor a esta fundación española y animó el encuentro de la comunidad asturiana en el Centro Asturiano de México.
Estas actividades se realizaron en el marco de la invitación que hizo la UNAM a la Fundación Príncipe de Asturias, la cual, en el año 2009, reconoció a la máxima casa de estudios con el Premio Príncipe de Asturias en el rubro de Comunicación y Humanidades.
En recuerdo de este galardón, la UNAM instaló una placa conmemorativa a un costado de la torre de Rectoría, develada por el rector José Narro Robles la semana pasada.
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