Fotos de Facebook de Cesia Abigail
Estados Unidos.-
Marcus, un vagabundo que recorría las calles de Minneapolis en Estados Unidos, continuamente acudía a pedir dinero a la cafetería “Abi’s Café”, su propietaria Abi decidió darle un trabajo en lugar de regalarle unas monedas y se llevó la sorpresa de su vida.
Otras personas en su lugar pudieron haber corrido a Marcus, pero Abi le abrió las puertas de su negocio, haciendo una hermosa acción y demostrando que los corazones buenos aún existen.
-“¿Me regalaría una monedita?”, le dijo Marcus a Abi, quien en esos momentos atravesaba por una mala economía pero necesitaba personal, así que le dijo: -¨Yo te veo sano, no sería mejor ganarte tus propias monedas con un empleo?, Marcus le hizo saber lo mucho que le gustaría trabajar pues a decir verdad si era penoso andar pidiendo por las calles pero confesó que no lo contrataban y por la necesidad de llevarse algo a la boca terminaba pidiendo.
“Sabía que no tenía experiencia, de sus antecedentes penales y que se pasa de los 30 años, el conseguir un empleo es muy poco probable, por eso es que tantas personas terminan en las calles mendigando pero decidí darle una oportunidad”, dijo Abi.
Mantener la cafetería implicaba un reto importante para Abi, sin embargo, necesitaba que alguien le ayudara en la cocina en cuestión de la limpieza, así que no dudó en ofrecerle empleo a Marcus a cambio del pan de cada día, aclarándole que cuando se estableciera la economía, comenzaría a darle un sueldo.
Gustoso Marcus aceptó, no podría creer que por fin alguien le ofreciera empleo, no pudo ocultar su emoción y sus ojos se llenaron de lágrimas. Abi recibió una gran sonrisa como agradecimiento.
A través de su cuenta de Facebook Abi compartió esta anécdota destacando que Marcus estaba feliz y que no sólo hacía las labores correspondientes sino que le ayudaba con otras tareas extras.
“Marcus es muy responsable, a diario cumple con su horario y respeta las reglas del lugar”, escribió en su muro.
Sin embargo, cuando finalmente el café comenzó a dar frutos económicos Marcus recibió paga y ya no permitía que Abi le regalara la comida, sino que él se sentía orgulloso de poder pagarla con su esfuerzo y trabajo.
La vida de vagabundo de Marcus cambió radicalmente, recuperó la confianza en sí mismo y se ganó la de los demás, no sólo obtuvo un empleo sino también amigos.
No obstante, las sorpresas para Abi seguían ya que se percató que Marcus con su sueldo le estaba comprando el desayuno a una mujer vagabunda en el intento de hacer la misma acción que ella aplicó con él meses antes.
Obviamente observar esta situación derritió el corazón de Abi y confirmó que esta acción había sido la correcta.
¿Tu le darías una oportunidad a una personas en estas condiciones o solamente unas monedas?