México, D.F. / Julio 27.-
Al parecer la fortuna de la fallecida cantante de soul, Amy Winehouse, asciende a unos 25 millones de libras y se especula que vaya en aumento, sin embargo, su ex marido Blake Fielder-Civil no recibirá un solo centavo de la millonaria herencia de la cantante.
Los padres y el hermano de la británica serán los que reciban el dinero que la cantante obtuvo en vida, y además habrá un disco póstumo.
Blake fue eliminado del testamento de la cantante en 2009, poco tiempo después de la separación de ambos, pero el ex esposo solicitaba cobrar regalías por el disco “Back to black”, que le mereció los cinco premios Grammy tras su divorcio. Por si fuera poco, el ex marido quien dijo haber quedado destrozado por la muerte de “el amor de su vida”, no tuvo oportunidad de acudir a la ceremonia de despedida que se realizó de forma privada en el cementerio de Edgwarebury, donde se encuentra enterrada su abuela.
Queda destrozado
La ex pareja de la cantante, Reg Traviss, refirió lo devastado que se encuentra tras la noticia de haber perdido a “su gran amor”.
“Ella fue una persona bella y brillante, mi gran amor”, aseguró Traviss a la prensa inglesa. “Me cuesta expresar por lo que estoy pasando y quiero mostrar mi agradecimiento a todas las personas que le han ofrecido sus respetos y que lloran la muerte de Amy”, dijo.
Además la mamá de Blake comentó que él debe asumir la responsabilidad que le corresponde sobre el incidente que llevó a Amy a la tumba.
“En mi corazón, yo creo que Blake tiene que adjudicarse parte de la culpa por su temprana partida”, dijo Georgette Civil. “No puedo decir si Amy consumía o no drogas antes de conocer a Blake. Creo que eso es algo que nadie sabrá nunca. Pero sí, en mi interior creo que Blake tiene parte de culpa”, admitió la ex suegra de la cantante, quien asegura que su hijo puede recaer en situaciones autodestructivas e incluso ha pensado que su hijo puede cometer suicidio.
Despedida íntima
Familiares y amigos se reunieron este martes en el cementerio Edgwarebury en el norte de la capital británica, Londres, para dar el último adiós a la cantante inglesa.
A sus padres, Mitch y Janis Winehouse, se sumaron su novio, el director de cine Reg Traviss, el productor musical, Mark Ronson, Kelly Osbourne, la hija del rockero Ozzy Osbourne y el cantante Brian Adams.
La ceremonia incluyó oraciones en inglés y hebreo y fue oficiada por un rabino, ya que la familia Winehouse es judía. El oficio terminó con una interpretación del tema “So far away”, de Carole King, uno de los temas favoritos de Amy Winehouse.
Al parecer, las últimas palabras de su padre fueron: “Buenas noches, mi ángel, duerme bien. Mamá y papá te quieren mucho”.
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