Calderón da respuesta “irresponsable”
ante crisis: Beltrones

Manlio Fabio Beltrones no duda. Apunta y dispara: el presidente Felipe Calderón ha actuado “irresponsablemente” frente a la “crisis de seguridad que vive el país. Sus respuestas —como la cadena perpetúa— son “mediáticas y simplistas”; no tiene estrategia, se parece a Vicente Fox al gobernar con encuestas, y no reconoce que su sistema de procuración de justicia es un fracaso y urge un cambio de fondo al sistema político.
Y remata: “Hoy tenemos un gobierno de cuates, un gobierno de compadres, un gobierno de amigos ineficaces, poco talentosos y nada preparados para gobernar este país. México no merece esto”.
Para el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, México vive una situación en extremo delicada, incluso con mayores riesgos que lo que se vivió en el fatídico 1994. “Estamos a punto de conformar la ‘tormenta perfecta’ en este país. Y es lo que hay que evitar. Problemas económicos, estanflación (estancamiento con inflación); problemas políticos, que surgen de una elección tan viciada como fue la del 2006; problemas sociales, que surgen de una pobreza extrema, que convive con una riqueza insultante (…), problemas de inseguridad pública que tenemos hoy en día, ante la incapacidad de un gobierno que no encuentra respuestas para los cuatro problemas”.
—¿Se está gobernando con encuestas y con medios nada más? —se le pregunta al también coordinador senatorial del PRI, en entrevista con EL UNIVERSAL.
—Sí, y creo que este es un vicio que se asumió del pasado y del reciente pasado. Veamos el fracaso que vivió Vicente Fox y que no lo vaya a vivir en carne propia Felipe Calderón…
—¿Se está pareciendo Felipe Calderón a Fox?
—Pues si no se está pareciendo, mucho se le parece.
Recién desempacado de sus vacaciones, en visita a las instalaciones de EL UNIVERSAL, Manlio Fabio analiza el momento en el país. En seguridad habla de una “crisis grave” por el disparo en secuestros y la violencia del narcotráfico. Y en lo económico, apunta, viene una etapa recesiva, que ya empezó en Estados Unidos, marcada por inflación sin crecimiento, conocida como estanflación. “Cada una de las respuestas del gobierno para estos graves problemas ha sido tan simplista que no impacta. Estos problemas no se resuelven tan sencillo (…) con soluciones mediáticas”.
—Hablar de crisis y de ‘tormenta perfecta’ nos remite a 1994, año difícil en la memoria de los mexicanos. ¿Estamos en un escenario similar al que vivimos en el 94?
—No me gustaría tratar de sacar un parangón con el 94, tan triste que vivimos en nuestro país, sobre todo los priístas (…). Yo siento mucho más grave el 2008 que el 94; en 94 teníamos identificado el problema en la confusión que generó el asesinato de Luis Donaldo Colosio; pero lo que tenemos este 2008 es una acumulación de problemas que no están haciendo ver al gobierno inteligente en propuestas estratégicas que busquen resolverla todas y cada una.
—Pero si en 94 vimos crímenes políticos, irrupción de guerrilas, desestabilización, ¿estamos ante esos riesgos ahora o ante riesgos más graves?
—Pongo el 94 a finales, la crisis económica que generó el “error de diciembre” (…) Yo siento que esto viene acumulado con proporciones de mayor riesgo en el 2008 y que atenderlos desde ahorita, identificándolo, pero también sacando como conclusiones que todos tenemos que ponerle una parte de nuestra voluntad para evitar que se vuelva a convertir en una catástrofe, es obligación de los tres poderes y de la ciudadanía en su conjunto…
—¿Cuáles son los riesgos de catástrofe?
—Primero que la impunidad se imponga ante la falta de propuestas estratégicas y estructurales para el tema de la delincuencia. Segundo que las diferencias sociales se agraven todavía más porque no se logra una política social que verdaderamente busque resolver la pobreza (…) La tercera, que sigamos viviendo los momentos actuales en los que la única respuesta a la delincuencia organizada y al narcotráfico sea tener al Ejército en las calles y no una política integral de seguridad pública. Y cuarto es que la gobernabilidad se vaya disminuyendo ante la falta de ideas por parte de este gobierno para entender que el México de antaño, que se podía gobernar con un solo partido político, ya no existe, y que hoy el sistema político tiene que modernizarse.
—¿Todo este fracaso en seguridad es responsabilidad de Calerón y de los gobiernos panistas o el PRI también es responsable por su herencia? —se le suelta a Beltrones.
—Se viene arrastrando de mucho tiempo atrás; no obstante (…) en el ejercicio del partido casi único gobernando, el sistema de procuración que tenemos y que no se ha modificado, todavía funcionaba mejor. ¿Por qué? Porque había un mando único (…) Antes por lo menos el gobernante en turno, me refiero al priísta, te decía: “sí, yo asumo mi responsabilidad”, y proponía soluciones. Hoy en día se anda buscando a quién se le echa la culpa. Hasta se acuñó la frase irrecuperable de algún gobernante que dijo: “¿Y yo por qué?”. Le voy a echar la culpa al otro. Esa era la forma mediática con la cual se resolvía la irresponsabilidad del gobernante incapaz.
—Eso fue el sexenio pasado. ¿Prevalece la irresponsabilidad en el sexenio de Calderón?
—Obviamente y lo tenemos a vista de todos, hoy se busca encontrar culpables en otro lado, si no revísalo; el mismo presidente Felipe Calderón ha dicho: ahí está el Congreso que no me ha aprobado la propuesta que hice para implementar la cadena perpetua a secuestradores. Como si esa propuesta tan simple, que se ha estudiado por tantos años, no hubiese demostrado su incapacidad para resolver el problema. Se está gobernando a través de manipular a la opinión pública pero no de resolver los problemas…
*Gobierno de gabinete, no de cuates
Manlio Fabio Beltrones recuerda que en mayo de este año, el Congreso le aprobó al presidente reformas constitucionales para combatir a la delincuencia organizada. “Reformas que eran impensadas”, dice, y que en su momento fueron censuradas por los organismos de Derechos Humanos por ampliar las facultades del Estado al grado de arriesgar las garantías de los ciudadanos. Compara incluso esas reformas con la Ley Patriótica que el Congreso de EU le aprobó a George w. Bush para combatir el terrorismo.
“Estamos en una crisis de seguridad pública. El presidente desde que tomó posesión dijo: la policía es incapaz de combatir al narcotráfico y sacó al Ejército a la calle. Hoy ¿dirá el presidente: la policía que tengo es incapaz de combatir al secuestro? ¿a quién va a sacar a la calle?
“Qué tenemos qué hacer? Revisar estructuralmente qué está pasando, y partamos de un punto: ha fracasado el sistema de procuración de justicia que se tenía planeado para otro tipo de gobierno. Cambiémoslo. Busquemos la autonomía del Ministerio Público, para que de verdad represente a la sociedad. Y démosle al Ejecutivo, al presidente una fiscalía que maneje las policías, pero que el MP, representando a la sociedad, vea los excesos de estas fiscalías al hacer las denuncias y la interposición de recursos ante el Poder Judicial”.
El senador priísta habla de crear una Ley Federal Antisecuestro, y retoma también, como soluciones a estas crisis que vive el país, una propuesta suya que intentó negociar en la mesa de reforma del Estado, y que fue rechazada por el PAN y el gobierno de Calderón: la existencia de un “gobierno de gabinete”, donde el Presidente de la Repúbica designe a los secretarios y éstos sean sancionados por el Congreso. Y ante el temor y las críticas que despierta su propuesta, propone que se apruebe con un transitorio para que entre en vigor hasta el 2012.
“Lo que yo quiero es que en el futuro no vayamos a tener, como hoy lo tenemos, un gobierno de cuates, un gobierno de compadres, un gobierno de amigos ineficaces, poco talentosos y nada preparados para gobernar este país. México no merece esto”.