Washington D.C., EU.-
El fallo judicial contra las acciones de alivio migratorio colocó contra la pared al presidente Barack Obama y dejará en manos de la Suprema Corte de Justicia determinar la suerte de cinco millones de indocumentados, destacó hoy la prensa estadunidense.
La mayoría de los principales rotativos nacionales coincidieron que el fallo emitido la noche del lunes por la Corte de Apelaciones del Quinto Distrito de Nueva Orleans significó un serio revés a los esfuerzos de Obama por evadir al Congreso en el ámbito migratorio.
Hicieron notar que este dictamen podría impedir al mandatario concluir su gestión brindando protección a menos de las mitad de los 11 millones de indocumentados, ante la inacción en el Congreso, donde los republicanos han bloqueado toda acción en pos de una amplia reforma migratoria.
Algunos como Los Angeles Times calificaron la decisión como “casi fatal” para los esfuerzos del mandatario y su administración para proteger a cinco millones de inmigrantes indocumentados de la amenaza de deportación.
Hizo notar que el fallo “pudo haberse dado muy tarde para que la administración pudiera apelar ante la Suprema Corte de Justicia y tener un fallo a favor antes de que Obama deje la presidencia”.
Sin embargo, The New York Times consideró que existe tiempo para que el gobierno pueda llevar el caso ante el máximo órgano judicial con la expectativa de que tener un fallo el próximo año, antes que el mandatario concluya su periodo.
“Este fallo es el último revés a los esfuerzos del presidente para salvar la inacción legislativa utilizando el poder de su cargo para darle nueva forma a la manera como las leyes de migración son aplicadas”, indicó.
El dictamen emitido por un panel de tres jueces prolonga la suspensión dictada antes por el juez federal de Andrew Hansen de Texas para que el gobierno implemente las medidas ejecutivas dictadas por Obama en noviembre del año pasado.
Esa suspensión se dio en respuesta a la demanda contra estas medidas, interpuesta por 26 entidades encabezada por Texas.
El diario Chicago Tribune hizo notar que aunque el gobierno podría solicitar una nueva revisión sobre la decisión del juez texano, algunas agrupaciones civiles lo han urgido a llevar el caso ante la Suprema Corte.
Consideró igualmente que el fallo “disminuye aún más los prospectos para la implementación de la acción ejecutiva antes de que Obama deje la presidencia” al hacer notar que el desahogo de nuevas apelaciones podría tomar meses e incluso resultar en el retorno del caso a Texas.
The Washington Post comentó que pese a sus implicaciones, el fallo no fue sorpresivo del todo para el gobierno debido al dictamen emitido meses atrás por otro panel de esa corte en contra de la petición del Departamento de Justicia para suspender el fallo de Hansen.
“La decisión significa que una de las principales iniciativas migratorias de Obama permanecerá en el limbo, casi un año después de que fue anunciada, y deje en duda si el programa podría ser iniciado antes de que su mandato expire en enero de 2017”, apuntó el matutino capitalino.
Pili Tobar, vocera de la agrupación Latino Victory Project, dijo que aunque la decisión no fue del todo sorpresiva, “resulta frustrante que políticos conservadores antiinmigrantes continúen haciendo daño a las familias, colocando intereses políticos antes que los valores del país”.
“Nuestra esperanza es que la administración Obama apelará esta decisión y que la Suprema Corte de Justicia decidirá escuchar este caso y hacer prevalecer el poder del presidente para establecer prioridades en la aplicación de las leyes migratorias”, manifestó Tobar.