Acapulco, Gro.-
El aspirante a candidato independiente por la Presidencia de la República, Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco”, bromeó ante banqueros para obtener recursos para su campaña.
“A ver si alguno me da un préstamo para la campaña. Pero a la palabra, porque el INE los va a fiscalizar”, dijo el neoleonés.
Al participar en la edición 81 de la “Convención Bancaria”, moderado por el colaborador de EL UNIVERSAL, Leonardo Curzio, el gobernador con licencia de Nuevo León confió en obtener la totalidad de firmas solicitadas por la autoridad electoral, con lo que no quiere confrontar al Instituto Nacional Electoral (INE) sobre la autenticidad de las mismas.
“Le mandé dos millones de firmas, no necesito pelearme con ellos. Quizá no confío mucho en el INE, pero es la autoridad y tengo que respetarla”, comentó el aspirante.
“El Bronco” este jueves, dio a conocer que su gabinete será conformado por 50% hombres y 50% mujeres, y que la Secretaría de Hacienda estará a cargo de un empresario.
Reiteró que no confía en la prensa, al asegurar que “Facebook es más fregón que los periódicos”.
Destacó que no necesita los asesores económicos de José Antonio Meade o Andrés Manuel López Obrador y que durante su gobierno en Nuevo León se reestructuraron las condiciones de crédito con algunos bancos.
En una administración, dijo, se necesitan expertos en lugar de políticos. “No necesito a un asesor como Poncho Romo. Él ha quebrado todas sus empresas”, comentó, lo que provocó risas y aplausos entre los asistentes.
Rodríguez Calderón enfatizó que en caso de ganar la Presidencia de la República, adelgazaría la burocracia en todas las dependencias del país y reduciría el gasto público.
“Nos apretaremos el cinturón, eso es lo que pienso hacer si llego a ser presidente de este país; hay que quitar a todos los huevones de este país, hay que quitar a todas las dependencias que no sirven, que son un lastre y que se gastan los impuestos de la sociedad”, añadió Rodríguez Calderón.
Expuso que cuando se aumentó el precio de la gasolina en enero de 2017 tuvo una acalorada discusión ante el malestar de la población: “Me enojé con (José Antonio) Meade cuando decidió subir la gasolina, discutimos; le dije que no se puede salvar el gobierno incendiando al país, es mejor reducir el gobierno”.
