El Huracán Moreliano, Isaac Fonseca, estuvo a un paso de salir por la puerta grande de la Plaza de Las Ventas de Madrid, al cortarle la oreja al imponente toro “Brigadier” de 667 kilos de peso de la ganadería de Pedraza de Yeltes, corrido en sexto lugar y que mereció la vuelta al ruedo.
Fonseca que enfrentó a un auténtico “pavo” tuvo que lidiar también con una tarde lluviosa y con viento que definitivamente condicionó y puso en riesgo el desarrollo de la lidia.
Fonseca al torear al último de la corrida tuvo que convencer a un público empapado por la lluvia, soportando el frio clima y casi totalmente aburrido por las condiciones generales del festejo, lo que hace aún más meritoria la actuación del torero mexicano, que tuvo a todos en un hilo esperando que por fin un mexicano saliera en hombros de la Plaza más importante de España y romper así ese larguísimo e interminable record de Eloy Cavazos como el ultimo mexicano que salió por la Puerta Grande hace más de cincuenta años.
Vimos por televisión al moreliano decidido a alcanzar el triunfo abriendo el trasteo del sexto de la tarde citándolo de largo y con rodillas en tierra para ligarle seis muletazos al buen toro de Pedraza de Yeltes, después el “Huracán Moreliano” le cuajo tandas derechistas en lo que redundó en una meritoria faena que bien pudo alcanzar el corte de las dos orejas, lástima que el gozo se vino al pozo y después de un pinchazo Fonseca acabó con el gran toro colorado.
La oreja para el mexicano se consideró justificada, y el premio para el toro con la vuelta al ruedo fue un poco exagerado, así se las gastan los españoles a la hora de calificar la actuación de los toreros mexicanos.
Aquí lo importante es que vimos a Fonseca, decidido como el que más, con ese deseo de convertirse en figura del torero y que no se amilanó ante el enorme burel que le tocó en suerte lidiar, debemos sentirnos contentos y orgullosos que tenemos un torero que tarde o temprano alcanzará el triunfo que merece en Madrid y que con ello la Fiesta Brava mexicana resurja con un torero que se entregue cada tarde como lo hace Isaac Fonseca y que con ello despierte el interés en los nuevos aficionados a los toros y en los que tenemos ya en esto.
Nos hace falta el triunfo de un mexicano en Madrid y que su triunfo resuene por todas partes, esperemos que suceda y pronto, en beneficio del toreo mexicano y de su fiesta brava.