Este sábado hemos visto un partido engañoso, en el cual se podría pensar en un equipo felino avasallador, dominador y con el control total del balón, más no fue así, pues al tener un equipo potosino con un amontonamiento de media cancha hacia atrás, se complicaron las acciones al equipo nicolaíta que nunca pudo realizar acciones creativas y de enlace con Gignac, Quiñones y demás ofensivos a lo largo del partido.
Y hay que reconocer que el San Luis pobló zonalmente su media cancha y la defensiva en forma perfecta, por lo cual Tigres no tuvo otra opción que recurrir a balonazos al área de Barovero, y más del 60 por ciento de esos pelotazos fueron rechazados por la defensiva. Y si acaso hubo algún remate fortuito, fue resuelto por el arquero visitante.
Es preocupante que Tigres no tuvo la creatividad para generar asistencias de gol con ventaja para el remate de los ofensivos.
Todos fueron esos centros “a la olla” buscando la buena fortuna de que alguien rematara, o esperando un balón perdido en algún rebote, o el error del rival.
No sucedió nada de eso.
Muy meritorio el trabajo del conjunto potosino en su marca zonal y personal a los peligrosos atacantes felinos, como Gignac, Quiñones, y quienes subían al ataque para tratar de concretar.
El partido fue igual de trabado en la cancha del San Luis, con buen trabajo de marca con la entrada de Ibáñez y el “Diente” López.
No hubo facilidades para que tuvieran opciones de gol.
Hay que hacer notar que en una de las poquísimas llegadas del San Luis, hubo una clara mano dentro del área de Igor Lichnovsky, pero por inciertas razones no fue marcado por el árbitro como penal ni tampoco por parte del VAR a favor del cuadro visitante.
Eso se discutirá ya por los diversos medios informativos, para ver a detalle, si estuvieron correctos el árbitro y el VAR en la decisión que tomaron.
Cocca quedó a deber en su estrategia para ganar este partido, que estaba presupuestado para obtener los 3 puntos.
Se vio un Tigres como se veía con el Piojo Herrera.
Y yo, que adjetivé al equipo de San Nicolás como “La aplanadora del Futbol Mexicano”, espero que el equipo solamente haya tenido una mala noche, y en las próximas 2 o 3 jornadas regresen a lo que mostraron en los partidos que ganaron, gustaron y golearon, para confirmar que serán esa nueva aplanadora que ilusionó a su gran afición, y que hoy al término del partido esa misma abucheó a los felinos.