Los pleitos que se traen los panistas está dando mucho de que hablar, en México y por supuesto en Tamaulipas…
Todo indica que, lo que hemos visto hasta ahora es apenas una pequeña probadita de lo que veremos conforme nos acerquemos a la fecha de cambio de su dirigencia nacional.
Si bien, los blanquizales dicen que por el momento están concentrados en las elecciones de julio próximo.
No es poca cosa las elecciones en 14 estados del país, donde se jugarán entre otros cargos, lo que fue para ellos su joya de la corona… La gubernatura de Baja California, que usted sabe fue su primer bastion, y de los únicos que no han perdido en los últimos años, cuando han venido en caída libre.
En el caso de Tamaulipas, el hecho de los reveses a las candidaturas en Reynosa, los pone de manera similar en grillas e intrigas, pleitos y animadversiones ante una elección que en Tamaulipas, no se les dará nada fácil. Y es que no es lo mismo los 3 Mosqueteros, que 20 años después.
Su pasado reciente tuvo como padrino a Felipe Calderón, con todo el poder de su mandato filtrando información a los medios y utilizando de alfil a Marisela Morales en la PGR.
El PAN, en este 2013, no tiene el respaldo de la presidencia y trae un enorme desgaste interno. Sus elecciones primarias fueron cenas de negros y las heridas no se cerraron. Y simplemente hoy se nota que supuraron lo peor de su interior.
Así que llegarán al nombramiento del sucesor de Gustavo Madero, con heridas y raspones.
Hay una enorme división y cada una de sus partes se están enfocando en lo suyo.
Todos los grupos quieren la dirigencia nacional, porque es la que deja.
Está ya el depuesto Ernesto Cordero, como suspirante naturalito a la dirigencia nacional.
También Josefina la quiere. Por eso vino a Matamoros a reaparecer, en un evento que más que de Lety, fue de la propia Josefina.
Sin embargo, este fuego amigo que dispararan contra Madero y la institución actual los otros aspirantes, se dejará sentir. A ninguno de los que la quieren les beneficia que Cordero saque su elección.
El pronóstico, es que como sucedió con José Ramón y Chuma en Reynosa.
Estos también terminen por acabarse solos.
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