El gobierno mexicano, a través de la Secretaría de Economía, publicó un acuerdo en el Diario Oficial de la Federación el 5 de febrero de 2025, eliminando las disposiciones que prohibían la importación de maíz genéticamente modificado para consumo humano. Esta acción busca evitar represalias comerciales y mantener relaciones estables con sus socios del T-MEC.
Es importante destacar que, aunque México es autosuficiente en la producción de maíz blanco para consumo humano, depende en gran medida de las importaciones de maíz amarillo transgénico, principalmente de Estados Unidos, para la alimentación animal y usos industriales. En 2024, las importaciones de maíz amarillo transgénico alcanzaron un récord de 23.8 millones de toneladas, representando más del 50% del consumo nacional.
A pesar de la retirada de la prohibición de importación, el gobierno mexicano mantiene su compromiso de prohibir la siembra de maíz transgénico en territorio nacional, con el objetivo de proteger las variedades nativas y la biodiversidad del país.
Esta situación refleja la complejidad de equilibrar la soberanía alimentaria, la protección de la biodiversidad y el cumplimiento de los compromisos comerciales internacionales.