Tampico hermoso, oh, puerto tropical, tú eres la dicha de todo mi país; y por doquiera de ti me he de acordar,
por tu tesoro, al pobre haces feliz.Seguramente habrán escuchado la canción que popularizara Antonio Aguilar. La mera verda’ me causó una grata impresión la ciudad de Tampico, en una visita que realizamos en esta semana.
Rosa María me convenció que porque iba a la Expo Esencia de Mujer, en el Hotel Hotsson, donde llevaría sus productos ecológicos. Y pos no me hice de rogar.
-Vamos viejo, para que conozcas Tampico. Y sí, fui esta semana y la pasamos muy bien.
Ahí cercas de la Expo Tampico o Centro de Convenciones y Exposiciones, que por cierto traerá a Gloria Trevi, María José, Los Invasores de Nuevo León, hasta Bely y Beto. Fui a conocer el lugar de paso a los “Juanchos”, que son los cocodrilos que habitan en la Laguna del Carpintero, un bello lugar que le encanta a los visitantes y son el orgullo de los tampiqueños y maderenses.
Porque ya sabrán que la Playa Miramar está del lado de Ciudad Madero, y se la pasan discutiendo que los mapaches que recorren las escolleras, muy amigables, son de este lugar y no de Tampico. Es difícil separar las dos ciudades, pero pos cuenta con dos alcaldes que le hacen la lugar para levantar esta región, que es muy socorrida en la época vacacional y en cualquier momento.
La región está en constante crecimiento, tiene mucha agua, que ya la quisieran en Reynosa y en Monterrey, por ahí dicen que Nuevo León tiene el proyecto de “importar” el vital líquido desde el río Pánuco. Habrá que ver.
Llama la atención varias estatuas que dan un reconocimiento a varios personajes como José Calderón Torres conocido como Pepito “El Terrestre”, un hombre de 2.30 metros, como también de Humphrey Bogart, actor de Casablanca, pero que en la Plaza de Armas que participó en la cinta “El Tesoro de la Sierra Madre”, sobre la novela del escritor Bruno Traven, Mauricio Garcés el actor de “Modisto de señoras” y “El criado malcriado” y hasta el presidente Porfirio Díaz, de quien se dice quiso hacer de la ciudad una Nueva Orleans mexicana. Y se nota por la belleza de sus casonas antiguas.
Vayan y visiten el sur de Tamaulipas, les sorprenderá que hay muchos lugares que conocer y probar, no solo la carne a la Tampiqueña, la gente es muy amable en general y creo que no es tan cara como en Monterrey o en Reynosa. Sean felices.