Ciudad de México.-
Alba Delhumeau confía que, en su debut como productora de teatro, Imelda Garza aceptó trabajar de forma gratuita en sus obras y, a cambio, le pidió que le diera clases gratuitas de canto, porque quería mejorar su forma de interpretación, motivo por el que pidió al público que no juzgue más a la joven, de la que guarda un muy buen recuerdo.
Garza ha sido señalada por la opinión pública, desde que se dio a conocer los problemas que enfrenta con su suegra, Maribel Guardia, que la denunció penalmente por violencia familiar; en redes sociales, la mayoría afirma que lo mejores que José Julián se quede al cuidado de su abuelita.
Las opiniones que, en principio, se habían dividido, comenzaron a inclinarse del lado de la actriz, debido a las presuntas pruebas que demostrarían que la joven sí consume sustancias, a diferencia de lo que ha negado y lo que han arrojado los resultados de las pruebas toxicológicas a las que se ha sometido.
A esto se han sumado las declaraciones de personas cercanas a Imelda y Julián Figueroa (1995-2023), que afirman que fueron testigo de comportamientos de la joven, poco idóneos, para una madre de familia.
Sin embargo, Alba Delhumeau ha sido una de las personas que se mantiene firme, en cuanto a su apoyo a Garza, como demostró al compartir una fotografía en la que aparecen juntas, a través de la que expuso que, en su caso, guarda una muy buena impresión de la joven.
“Yo sólo quisiera comentar que me tocó convivir con Ime y, así como han comentado cosas terribles, quisiera dar la otra cara de la moneda también”.
Delhumeau debutó hace poco como productora teatral, fue cuando contactó a Imelda para que trabajara con ella en dos de sus obras, de las que la joven no recibió ningún tipo de sueldo, debido al limitado presupuesto, lo que no impidió que aceptara con gusto la invitación.
Aunque reveló que la joven pidió que le diera clases de canto, a cambio de su participación en las puestas en escena:
“A mí no me cobró en las obras porque yo estaba empezando como productora y me cambio su participación por clases de canto”.
También dijo que, durante su interacción, fue testigo de cómo sufrió no sólo por la partida de su esposo Julián, sino por ser testigo del desconsuelo de Maribel por perder a su único hijo.
“Siempre habló muy bien de su tía Maribel, se ponía muy triste cuando veía a su tía Maribel llorar cada mes por su hijo, Ime sí amaba a su esposo Julián, pues yo también la vi llorar por él, siento que deberíamos dejarla sanar por tantas cosas y no juzgarla tan severamente porque, con la vara que medimos seremos medidos”.
