Ciudad de México.-
El actor Rafael Inclán aseguró que la polémica en la que se ha visto envuelto, debido a un comentario que hizo sobre la llegada a la presidencia de la primera mujer en México, Claudia Sheinbaum, tomó otro nivel porque pusieron palabras en su boca que él nunca dijo, pero aún así decidió pedir disculpas.
“Me metieron en una bronca, no sé quién, si fue alguien de prensa o algún barbero, pero fue a decir cosas que ni siquiera yo dije, yo nunca mencioné la palabra ‘sirvienta’, he dicho lo de ‘ama de casa’ porque es la realidad, qué honor que todas las amas de casa puedan llegar a tener un puesto así; ya pedí disculpas y para adelante”, explicó el actor la noche de ayer, durante su paso en la alfombra roja del musical “Jesucristo Superestrella”.
Inclán comentó que se acababa de enterar que la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, había aceptado sus disculpas y eso era algo que lo tenía más tranquilo; también señaló que no le importaban las críticas que recibió por parte de algunos colegas y en las redes sociales, porque no simplemente no ve o lee las cosas negativas, pero agradece que compañeros como Manuel “El Flaco” Ibáñez le hayan externado su apoyo; descartó cualquier encuentro con la mandataria.
“Ella tiene problemas mucho más importantes que atender que recibir a un actor”
Inclán recordó que la política siempre ha sido objeto de tema en la comedia, donde los actores siempre han sido muy incisivos en su crítica, como pasa con su personaje en el musical “Perfume de Gardenia”, donde tiene un monólogo para hablar al respecto, pero que ha aprendido que ahora tiene que tener cuidado al hablar de las cosas.
“Uno tiene que tener cuidado de no dejar de decir las cosas, pero decirlas de un modo que no lastimen y buscar la risa, el comediante tiene que verse más inteligente y abusado para elaborar los chistes”, dijo Inclán.
Y hablando de política, entre los invitados de la noche estuvo Miguel Ángel Mancera, quien fuera jefe de gobierno de la Ciudad de México, quien explicó que es amigo del productor Alejandro Gou, y que es a través de esta amistad que descubrió la importancia social del teatro, por eso celebraba que hubiera en cartelera un montaje como “Jesucristo Superestrella”.
Respecto a la polémica que vive el comediante Rafael Inclán, por llamar ‘ama de casa’ a la actual mandataria de México, Mancera señaló que los políticos son figuras públicas, y como tal, a veces están expuestos al juicio público, pero que tanto la política como el espectáculo deben aprender a convivir en armonía.
Andrea Legarreta y sus hijas, Mía y Nina Rubín, hicieron acto de presencia en el Centro Cultural Teatro I, con el fin de brindarle su apoyo a Erik Rubín, porque no sólo subió al escenario interpretando a Judas Iscariote, también está jugando el papel de productor en este montaje.
“Creo que es el papel de la vida de Erik, yo soy su fan y se lo dije alguna vez, sin duda es talentosísimo, es un profesional en toda la extensión de la palabra, ahora participando como productor es algo que le emociona muchísimo, es una locura cómo hace el personaje de Judas”, señaló Legarreta.