Roma / Noviembre 12.-
El Partido Democrático (PD) e Italia de los Valores (IDV), las principales formaciones de la oposición italiana, anunciaron hoy haber presentado una moción de censura contra el gobierno del primer ministro Silvio Berlusconi.
Portavoces del PD explicaron que su líder en la Cámara de diputados, Dario Franceschini, pidió al presidente de ese cuerpo, Gianfranco Fini que convoque lo antes posible a los representantes de los otros grupos parlamentarios para que determine la fecha de la votación.
En caso de que la moción tuviera éxito, el Ejecutivo podría caer anticipadamente.
Por su parte, el gubernamental Partido del Pueblo de la Libertad (PDL) dio a conocer que prepara la presentación en el Senado de una moción de apoyo al Gobierno, que sea votada en tiempos que no interfieran con la aprobación del presupuesto para 2011.
Fabrizio Cicchitto, portavoz del PDL en la Cámara de diputados, dijo que tras la aprobación del presupuesto se espera verificar en el Parlamento si el Ejecutivo aun cuenta con la mayoría necesaria para gobernar.
Si ello no es así, dijo, no quedará otro camino que el de convocar a elecciones anticipadas.
La víspera fracasó una mediación entre Umberto Bossi, líder de la Liga del Norte (miembro del gobierno) y Fini, al frente del movimiento disidente Futuro y Libertad (FLI), que pide la renuncia de Berlusconi como condición para no abandonar el Ejecutivo.
Pero el primer ministro, quien retornó anticipadamente de la cumbre del Grupo de los 20 (G-20) en Corea del Sur, reiteró que no dimitirá.
FLI, de su parte, hizo saber que el lunes próximo retirará a sus hombres dentro del gobierno, entre ellos el ministro de Políticas Comunitarias, Andrea Ronchi, y el viceministro de Comercio Exterior, Adolfo Urso.
El retiro de los “finianos” no significa, sin embargo, la renuncia automática de Berlusconi, que podría reorganizar su Ejecutivo buscando el apoyo de otras fuerzas menores.
Según analistas, el primer ministro puede decidir mantenerse a toda costa en el puesto, en espera que el FLI vote la moción de censura a su gobierno, para poderlo culpar del fin anticipado de la legislatura y de la inestabilidad política.
Opinaron también que una vez aprobada la ley presupuestaria, el primer ministro podría abrir la “verifica”, para establecer si aun cuenta con la mayoría en las dos ramas del Parlamento.
De no ser así, se abriría formalmente la crisis de gobierno, con la posibilidad de nombrar a un Ejecutivo técnico (encargado de las cuestiones administrativas) en espera de las elecciones anticipadas.
Según los sondeos, el candidato más popular para estar al frente de un eventual gobierno técnico es el actual gobernador del Banco de Italia, Mario Draghi.
Lo que es un hecho, sin embargo, es la agonía del cuarto Ejecutivo encabezado por Berlusconi, arrastrado por divisiones internas y escándalos sexuales.
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