Cd. Victoria, Tamps.-
“Los mexicanos no le tememos al fuego, nunca nos han enseñado a como no quemarnos y que les enseñemos a nuestros hijos”, expresó en esta capital Virginia Sendel de Lemaitre, presidenta nacional de la Fundación para niños quemados Michou y Mao.
“Prendemos fuego en todas las celebraciones, los niños que más se queman son por líquidos hirvientes y son de 1 a 5 años, eso quiere decir que es culpa del adulto no del niño”.
Por ello habló de la importancia de que se implemente la obligatoriedad, como en casi todos los países del mundo, la enseñanza de la prevención en cada escuela y que se incluya en el libro de texto.
“El libro de texto ya es muy grande, tiene demasiados artículos y programas y todos son prioritarios, hay que enseñar prevención de adicciones, detección de cáncer, pero hay países que la prevención para quemaduras está incluido en libros de primero a cuarto de primaria”.
Dijo que en materia de prevención hay mucho material para enseñar a los niños a cuidarse de las quemaduras, “canciones infantiles cantadas por Chabelo, con mucho contenido didáctico y los niños después enseñarán a los papás”.
Sendel de Lemaitre admitió que el quemado es el paciente más caro que existe y también el que más cuesta, y durante muchos años se hizo de cuenta que el quemado no existía, pero “afortunadamente hemos logrado hacer conciencia”, expresó.
Sin embargo admitió que no se puede precisar cuántas personas se queman porque la mayoría de estos accidentes ocurren en zonas rurales, a veces ahí mueren y lo entierran y no son parte de las estadísticas.
Expuso que en promedio seis niños al mes se trasladan a Galveston desde hace 14 años, y a la fecha son alrededor de mil 600 niños, pero además hay seis mil niños en el programa de atención a secuelas de todo el país.
No obstante los avances que se han registrado y del apoyo tanto federal como estatal que se ha obtenido en la atención a los quemados lamentó que no se haya contado con apoyo para la prevención en muchas entidades ni por parte de la federación.
Sendel habló de su sueño de que exista una unidad como la que tienen aquí y en otros siete estados en cada entidad.
“No voy a parar hasta que exista una en cada estado, seguiremos enviando niños a Galveston, pero ojalá en algún momento ya no tengamos qué hacerlo y se atiendan aquí”.
Por último precisó que en México solo existen ocho unidades de atención a quemados, por lo que faltarían 24 para tener esa cobertura en todo el país.