Pedro Angel y su esposa Alma Rosa, heredando candidaturas.
Zuazua, Nuevo León.-
Desde hace 75 años, el apellido Martínez ha sido sinónimo del poder político en Zuazua, Nuevo León, y sus herederos han hecho todo lo posible porque las cosas no cambien… incluso violar la ley.
Desde 1946, con la asunción de Pedro A. Martínez a la presidencia municipal de esta población ubicada al noroeste de la zona metropolitana de Monterrey, este apellido ha estado presente doce ocasiones en la galería de alcaldes.
Cobijados por las siglas del PRI y, más recientemente, MORENA, PT, PVEM y PANAL; hermanos, primos y ahora hasta una esposa, se fueron pasando la titularidad del Ayuntamiento hasta el 2006, cuando Roberto Montemayor, un personaje ajeno al clan de los Martínez, ganó la elección nominado por el PAN.
El gusto duró muy poco, pues la familia buscó regresar a la alcaldía y bajo el cobijo del PRI y MORENA, la obtuvieron en tres ocasiones con Pedro Ángel Martínez en el trienio 2009; Jorge Luis Martínez (su primo hermano) en el 2012 y, otra vez, Pedro Angel en la administración 2018-2021.
Durante esa época Zuazua registró serios problemas generados por un explosivo crecimiento poblacional calculado en el mil por ciento, tal y como lo reconoció el entonces alcalde Roberto Montemayor en una entrevista concedida a Hora Cero en el 2008.
“No es lo mismo mil 800 casitas a ahora mantener 23 mil casas con los mismos recursos de 7 mil gentes”, dijo.
Pero el problema más grande fue la delincuencia, algo a lo que no estaban acostumbrados los habitantes de esta apacible comunidad quienes vieron sorprendidos cómo alcanzó, incluso, a los integrantes del clan en el poder.
Esto es porque el entonces alcalde y hoy candidato a la alcaldía por el PRI, Jorge Luis Martínez Gutiérrez, fue víctima de un secuestro, mientras que su padre, Jorge Luis Martínez Martínez, fue asesinado.
DELITOS COMPROBADOS
El homicidio de uno de los suyos no importó a la familia pues en las elecciones del pasado 6 de junio, Jorge Luis Martínez volvió a buscar la la presidencia municipal cobijado por el priismo, mientras que su primo, el entonces alcalde Pedro Angel, buscó la reelección con el apoyo de MORENA, PT, PVEM y Nueva Alianza.
Todo iba de acuerdo al plan, pues de acuerdo al Programa de Resultados Electorales Preliminares, Pedro Angel obtuvo el triunfo superando con apenas 609 votos a su más cercano competidor, Mario Alberto Escoto García de Redes Sociales Progresistas.
Sin embargo, las irregularidades cometidas a lo largo de la jornada electoral eran evidentes, por lo que se interpusieron denuncias que generaron la carpeta de investigación 56/2021 y los Juicios de Impugnación JI-066/2021 y acumulados JI-072/2021, JI-099/2021 y JI-112/2021.
Tras analizar los hechos denunciados e investigados por la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales en el Estado de Nuevo León (FEDE NL), el pleno del Tribunal Electoral del Estado decretó por unanimidad la nulidad de la elección para la renovación del Ayuntamiento “al tener por demostrado que, en la campaña del candidato que había sido declarado ganador de los comicios municipales (Pedro Angel Martínez) se utilizaron recursos públicos”.
De acuerdo a la resolución, a la que Hora Cero tuvo acceso, el Agente del Ministerio Público Investigador de la Unidad de Investigación Número 3 de la FEDE NL “concluyó que se acredita que, en perjuicio de los principios rectores de la materia, existió una intromisión por parte del titular del ejecutivo municipal en los comicios, puesto que se implementó, indebidamente, un mecanismo de clientelismo electoral”.
Como parte de la investigación, agentes de la Fiscalía realizaron un cateo en la presidencia municipal de Zuazua, donde detuvieron a Daniel Martínez Lozano, secretario del Ayuntamiento y alcalde en funciones.
Según la resolución del tribunales, los fiscales aseguraron “equipo de cómputo propiedad del ayuntamiento y asignado al referido servidor público, en el cual se localizaron fotografías de credenciales de elector, sosteniendo que dicha conducta fue para favorecer la campaña de Pedro Martínez, y que fue determinante para el resultado de la elección”.
En el documento se detalla que en su declaración ante la Fiscalía, Martínez Lozano confesó que tenía en su computadora 636 fotografías de credenciales para votar y que “esa información era resguardada para el soporte de un programa de apoyo social a grupos vulnerables”.
Incluso aceptó que “durante la época de campañas, existió la entrega injustificada de despensas, en diversos sectores del municipio, a grupos vulnerables, generando un beneficio colectivo, con fines de apoyo electoral a una candidatura”.
Estas evidentes irregularidades llevaron a los magistrados electorales a declarar la nulidad de la elección y la revocar el otorgamiento de constancias de mayoría y validez otorgada a la planilla encabezada por el alcalde.
Ante la resolución, se prohibió a Pedro Angel Martínez volver a participar en el proceso electoral mientras se espera que el Congreso del Estado de Nuevo León, en el momento procesal oportuno, proceda legalmente en su contra.
Sin embargo, buscando aferrarse al poder, la familia Martínez no solo volvió a lanzar a Jorge Luis por la alcaldía bajo las siglas del PRI, sino que determinó nominar a Alma Rosa Montemayor Martínez, esposa de Pedro Angel, como candidata por la coalición MORENA, PT, PVEM y Nueva Alianza.
Buscando esconder lo evidente, la coalición evita mencionar públicamente la relación entre el alcalde saliente y a quien ahora decidieron que será conocida únicamente como “la señora Alma”.
LAS RAZONES DE PEDRO ANGEL
La obsesión y la familia Martínez por perpetuarse en el poder, especialmente en el caso de Pedro Angel, se explica con lo redituable que le ha sido ostentar la presidencia municipal en tres ocasiones.
Sobre la calle Ignacio Allende esquina con 5 de Mayo, a un par de cuadras del Palacio Municipal, una residencia se impone sobre el resto de las casas del primer cuadro.
Se trata de la construcción marcada con el número 225, una imponente construcción de color celeste con detalles de fina cantera y piedra laja.
El inmueble cuenta con una cochera suficiente para albergar seis vehículos, una cúpula, amplios jardines y un espacio techado y dotado con asador para realizar festejos y recibir invitados.
Esta es la mal llamada quinta (pues se trata de una residencia en forma) del alcalde Pedro Angel Martínez, quien de acuerdo a denuncias de algunos de sus ex colaboradores, adquirió en el año 2009 gracias al desvío de recursos federales destinados originalmente en convertir a Zuazua en un “pueblo mágico”.
En una denuncia a la que Hora Cero tuvo acceso, Carlos Cuauhtémoc Alvarez, ex asistente personal del alcalde, reveló que desde ese entonces Pedro Angel desvío materiales destinados al Ayuntamiento para embellecer su vivienda.
Como ejemplo citó la cantera de los ventanales de la residencia, que es la misma que se había comprado para mejorar el salón de actos, auditorio municipal y Polivalente de la colonia Carrizalejo.
Además, están las 80 luminarias y postes que formaban parte de una adquisición de 800 realizados por el Ayuntamiento y que fueron a dar a la residencia de la calle Ignacio Allende.
En su denuncia, Alvarez añadió que cientos de postes de luz que fueron retirados de las calles de Zuazua y que estaban elaborados de acero, se enviaron a una bodega presuntamente propiedad del alcalde, ubicada en la calle Francisco I. Madero número 106, en San Nicolás de los Garza.
Esta bodega, que actualmente luce abandonada, también tiene un acceso sobre la avenida Diego Díaz de Berlanga.
En la denuncia, Alvarez presume que estos postes de acero pudieron haber sido fundidos y vendidos en la empresa que Pedro Angel Martínez tiene en la ciudad de Houston, Texas.
Esta compañía es ADE Steel Suply Inc. y se encuentra ubicada en el número 3212 del Camino Laura Koppe con el teléfono (713) 699 3708.
De acuerdo a los registros, el dueño de la empresa es Pedro Angel Martínez y el director general es Ricardo Martínez Lara.
Y aunque el negocio apenas tiene tres empleados, reporta ganancias anuales de más de 472 mil dólares (9 millones 815 mil pesos).
Cabe señalar que en la fachada de la bodega ubicada sobre la avenida Diego Díaz de Berlanga a donde presuntamente fueron enviados los postes de acero propiedad de la ciudad de Zuazua, puede leerse la razón social ADE (la misma de la empresa de Houston), solo que aquí se dice que trata de una “comercializadora y servicios”.
A unos días de que se lleve a cabo la elección extraordinaria para la presidencia municipal de Zuazua, Nuevo León, el clan Martínez sabe que hoy más que nunca su presencia en el poder municipal está en riesgo.
Y aunque tiene dos fichas colocadas con las que espera llevarse la victoria, los electores de Zuazua tienen en sus manos el destino de esta familia que por décadas ha gobernado en el municipio.
Esto es mientras el Congreso del Estado decide actuar conforme a derecho y buscar sancionar al alcalde saliente, Pedro Angel Martínez, por las comprobadas irregularidades que cometió en su deseo por perpetuarse en el poder.