Monterrey, N.L.-
Luego de la trifulca que se registró en la Feria del Caballo de Texcoco por la negativa del cantante Luis R. Conriquez de interpretar corridos, en las redes sociales se ha generado un amplio debate sobre si la medida está coartando la libertad de expresión o no.
Es importante recalcar que a nivel federal apología del delito está tipificada en el artículo 208 del Código Penal y se castiga con trabajo comunitario, que puede ir desde las 10 hasta las 180 jornadas labores.
De acuerdo con declaraciones del propio cantante, antes de su presetación se le obligó a firmar un contrato en el que se comprometía a no interpretar temas que enaltecen delitos o personas vinculadas a bandas delincuenciales.
Y es que, cada entidad también tiene su propia legislación al respecto.
Por ejemplo, en Nuevo León se establece en el artículo 205 del Código Penal estatal que señala: este delito consiste en glorificar o elogiar un hecho delictivo o a su autor.
Las sanciones en la entidad pueden ser civiles o penales para quienes reproduzcan, difundan o comercialicen materiales que constituyan apología del delito.
La noche del 11 de abril, Luis R. Conríquez anunció que no cantaría corridos en su presentación en la feria, lo que provocó la furia de los asistentes.
Ante la negativa del intérprete, los seguidores comenzaron a lanzar objetos al escenario, por lo que la presentación se canceló.
El artista se vio obligado a abandonar el escenario, pero sin sus instrumentos, que fueron vandalizados por los asistentes.
En redes sociales se difundieron videos de la trifulca, en los que se aprecia a gente del público peleando y destruyendo los instrumentos.
Singer Luis R Conriquez refused to sing narco corridos at a show in Texcoco – perhaps in reaction to a report that the U.S. could cancel visas of those who sing them. The crowd went mad and smashed up the venue. This says a lot about narco culture in Mexico in this heated moment pic.twitter.com/LlGJqbeGsR
— Ioan Grillo (@ioangrillo) April 12, 2025