Migrantes en Reynosa reviven e
impulsan tradición de “Día de Muertos”

Reynosa, Tam. / Nov. 1
Tradiciones como el “Día de Muertos” recuperan vida en esta ciudad por la llegada de familias de Guanajuato, Coahuila, Nuevo León, Distrito Federal, San Luis Potosí y Veracruz, sitios donde esos festejos están arraigados y fortalecidos.

Por ser Reynosa uno de los municipios con las tasas más elevadas de crecimiento poblacional a nivel nacional, se propicia un mosaico de costumbres, tradiciones y festividades impulsadas por personas originarias de esas entidades del país.

Al llegar a esta ciudad fronteriza, estas familias se topan con modismos al hablar, regionalismos y costumbres en la gastronomía, vestido y forma de actuar muy distintas a las que se llevan a cabo en el interior del país.

Sus integrantes se ven inmersos en costumbres extranjeras, pues por su cercanía con Estados Unidos y su convivencia diaria, los residentes fronterizos acostumbran conmemorar diversas fechas que en el resto del país son desconocidas.

Por ejemplo, durante el mes de octubre, los estadunidenses celebran “El día de la cosecha” y “Halloween”, fechas que en ciudades como Reynosa también son festejadas sin saber su significado en ocasiones.

Ante esta situación, las autoridades del sector educativo ordenaron a las escuelas de nivel básico colocar un altar de muertos y fomentarles a los escolares esta tradición.

El jefe de la Oficina Regional de Educación en esta frontera, Julio González Ruiz, explicó que desde hace un par de años se ha solicitado a las escuelas que no fomenten las tradiciones de Estados Unidos y que en cambio, enseñen a los niños lo que es un altar de muertos.

“Queremos que a través de los maestros los niños sepan qué es un altar de muertos, incluso, se organizan para llevar algunas cosas como flores, pan, comida, papel picado y la foto de algún personaje de la escuela o de la vida pública que haya fallecido”, dijo.

En tanto, los residentes fronterizos originarios de otras entidades, colaboran con estas acciones al impulsar la instalación de altares de muertos y promoviendo las tradiciones que llevaban a cabo en sus lugares de origen.