Lo dijimos el lunes 11, lo repetimos este día 18, la gente jutgolera se está alejando de las gradas, ¡Y como no, si los encuentros están hórridos! San Luis-Rayados, Tigres-Tijuana (salvo por el gol de Fulgencio al final), estuvieron para llorar.
Pero ya en serio los encuentros, por cuánto a espectadores directos, el Puebla-León, el Juárez-Querétaro, Santos-Guadalajara, Atlas-Cruz Azul, San Luis- Monterrey y UNAM- Necaxa, reflejaron muchísimo menos de la mitad del aforo en los estadios, nada de llegar al 50 por ciento de ocupación, incluso CU en CDMX tiene cerrados varios tramos de gradas, como es casi todo el anillo superior.
Y la jornada anterior, también estuvo igual. ¿Carestía, economía familiar, fastidio, castigo de la afición por un país futbolísticamente mediocre tras de ser eliminados de justas mundialistas como Indonesia 2023 y Paris 2024, además de una selección mayor jugando basura?
Pues sí, todas esas opciones caben como causas.
La gente sin dinero en casa y a la vez muy molesta por la calidad que se está ofreciendo.
Solo nos gustó el Atlas-Cruz Azul, como partido con calidad, quizá algún otro pero se nos olvida, los que de plano estuvieron muy malitos, fueron los dos equipos regios.
Y ya la raza de Tigres, muy metida con el Piojo, ya lo traen de encargo, como a perro del mal.
EL PRIMER MUNDO
En cambio, el juego en El Gabacho entre Chelsea y América, fue otro Pedro, el graderío hasta las banderas.
Por cierto, sí que hay una marcada diferencia entre el fut de First Class y nuestro ratonero y tercermundismo rastrojo.
Los blues metieron dos equipos, 11 jugadores en el primer tiempo y otros tantos para el complemento, todos estrellas.
No hallabas a cuál formación irle, un primer mundo insultante y eso que ya dejaron ir a
Lukaku (Inter), Christensen (Barcelona) y Rüdiger (Real Madrid), entre otras siete bajas.
En definitiva, falta una sacudida tremenda a nuestro balompié de parte de la gente de pantalón largo, que si no, entonces el público se las va a dar y pegándoles donde más les duele, o sea, alejándose cada vez más de los estadios y dejando de adquirir la parafernalia o el marketing de cada equipo.
La llamada “mejor afición de México” anda aventando el arpa, a Tigres y Rayados en esta temporada solo les vale el que la vendimia de la taquilla se lleva a cabo mucho antes de que empiece la temporada, así es la raza de Nuevo León, primero muertos que sencillos, bien dice una frase de la raza sencilla del norte; “conmigo no and el hambre ni las pirujas mal vestidas”.
Si no fuera así, los estadios de Monterrey ya estarían flaqueando de raza.
A ver si esto levanta pronto, nos referimos a la calidad del juego o va a valer progenitora el asunto, estamos ante una debacle del pamblol mexicle, que se tiene que atajar ya.
Volver el ascenso-descenso, reducir tanto extranjero balín que solo está quitándole oportunidades a la chaviza azteca, hay casi nada de cantera.
Entonces si no se les mete miedo a los dueños del futbol y les obliga a cambiar diametralmente, los Jamaica, los Haití, los Guatemala y otros pueblos cuartomundistas, nos van a superar ¡gacho!
