…Arrastrando el apellido ¿o al revés? El caso es que la defecó Pumas y le dieron en la madre…patria; por favor señores, ¿Pero qué necesidad hay de ir a hacer esos ridiculazos gachos?
Hay que poner los pies en la tierra, porque no es lo mismo que el Manchester City, el Chelsea, el Real Madrid y el mismo Barcelona vengan a América con cara de Hernán Cortez, adoptando un perfil bajo, ocultando sus aviesas intenciones y sus abismales diferencias con nuestros ratoneros tercermundistas, pues cruzaron el charco para llevarse carretadas de “cueros de rana”; a que los nuestros vayan a querer pegarle al David y Goliath en su casa, ante su gente odiosa.
Los desgraciados del Barsa, malditos jilipollas, llegaron a “Las Indias” como aquel conquistador sanababiche, con piel de oveja, ocultando el lobo carroñero que era, inches culés venían por todo el tesoro, a cambio nos trajeron espejitos, vidritos, canicas y cuentitas.
La federación, la liga, los dueños de los equipos -y hasta los pobres jugadores deberían oponerse- deben evitar esos encuentros, al menos en estos tiempos en que el pambol mexicle está pasando las de Caín y vive sus peores momentos.
Por cierto ¿Cuándo diablos han tenido buenos tiempos, en clubes o en selección? Y no nos salgan con segundos, terceros y cuartos lugares en torneillos laneros (o Moleros, diría “El Tuca”).
PASEMOS AL TERRUÑO
Tigres siempre se lleva su tarrito de Vaselina cuando juega con Los Tuzos, sea en el “impasable” Volcán de San Nico o en la misma Bella Airosa, los color amarillo huevo, siempre terminan como muy bien nos lo cantó Freddie Mercury aquel 9 de octubre en el propio estadio de la UANL “Another One Bite The Dust” (otro que muerde el polvo).
Los Tigres se siguen mojando las ganas en el café, de ganarle a los pachucos, pachucos que juegan muy bien al fut y mejor contra ellos, siempre juegan con los sentimientos de la afición de los de por acá.
RAYADOS
La Pandilla comió pichón, León simplemente no fue al estadio BBVA, parece que se llenaron con el triunfo ante la Águilas de la jornada pasada y se quedaron en el bajío, muy bajitos los verdes en el césped de Guadalupe.
Bien por los Rayados, mejor por Ponchito que se sacó el partido de su vida (tres goles en un juego no se clavan todos los días).
Las Chivas (16) no puede ni con los chapitos del pacífico.
Y hablando de lo que les sucede al América (14) y a los de Guadalajara, en que ambos equipos están pa´l perro, el Ame le puede decir a los tapatíos, algo así como lo que dijo la piruja aquella a Pedro Navaja; “Yo que pensaba; hoy no es mi día, estoy salá, pero Pedro Navaja tú estás peor, tú estás en ná”.
RENOVARSE O MORIR
Ya portándonos serios, en el futbol mexicano todo debe cambiar, terminantemente, de manera rotunda, hablamos de todo lo que involucra a este deporte (hasta en el barrio, ya que en el rancho, las ligas llaneras son bien “laneras”, se han metalizado, solo andan tras la lana) se tiene que renovar todo en nuestro país.
Ojalá que nada más terminando el Qatar 2002, los dueños del balón se pongan a jalar en la materia, echarle todos los kilos al asunto
Recogemos opiniones de gente que le intelige a esto de andar 22 calzonudos correteando una bolita; ellos dicen que a la de ya, de una, debe volver el ascenso-descenso al fútbol profesional azteca.
Incluso se atreven a decir que de dos y hasta tres equipos subiendo y bajando cada temporada, para crear verdadera competencia, interés y preocupación y hasta miedo de los clubes, por hacer bien las cosas.
Restar extranjeros, pues viene cada masiosare, mucho “turista”, cada petardo que solo aterriza para saquear a los equipos.
Bajar número de forasteros vivales contratados y tanto bueno para nada en cancha, darle oportunidad a los jóvenes, volver a generar cantera, hoy salen a cuenta gotas los chamacos y luego ni juegan, solo allá en partidos moleros (en McAllen, Brownsville, San Antonio o en Califa) los llevan y les dan algunos minutos, pero a la hora buena del campeonato, las 17 fechas de la liga, son jugadas por 11 a 16 jugadores, en su mayorías papanatas traídos de Extranjia.
Hoy cada equipo puede registrar 10 forasteros y meter hasta 8 a un mismo tiempo en la cancha durante un partido de liga, fácil puede jugar todo el listado de arribistas.
¡No nos hinchen las pelotas! ¿Dónde diablos nos dejan a los mexicles, los de casa tienen que ser Hugo Sanchez, Rafa Márquez (a un servidor nunca le gusto este tipo), Cuauhtémoc Blanco, Horacio Casarín, Luis De La Fuente, Antonio Carbajal u otro garbanzo de a libra como esos?
Incluso hay quien dice que volver a los torneos largos, el de un año de duración y no dos o semestrales como ahora.
Que debe ser como en Europa y ya si los dueños quieren otra lanita, pues darles importancia o meterle relevancia y reflectores a sus torneos de copa o jugar contra gringos y canadienses, no sé, moverle a la mercadotecnias y sobre todo al “show business” para que saquen la marmaja que quieren, pero la liga, como fue antes de 1996, dejarla larga, más larga que los dueños y directivos.
los torneos largos.
En fin, hay muchas otras medidas que tienen que tomarse para revolucionar nuestro pambol, como eso del fuera de lugar, no puedes marcar offside solo porque el hombro del que anotó, los cuernos, la uña del dedo meñique o el juanete del jugador, se observa que estaba adelantado en relación al último defensa en línea.
Esas son jaladas, ¡dejen vivir al espectáculo!, que haya goles, es el alimento de ese deporte, de la afición, de todo lo que lo rodea, además la línea de referencia es mañosa, o mejor dicho las televisoras y los dueños del fútbol, son bien Gabinos para manejar las repeticiones maños.
Ya nos vamos, nos extendimos mucho esta vez; se vienen Pumas-Águilas, Guadalajara-Atlas, Cruz Azul-Toluca (el chorizo es líder, su único perdido fue con el Ame), Tigres recibe a Santos y Rayados visita a Necaxa.