Ciudad de México.-
La Arquidiócesis Primada de México consideró que “nuestro fracaso como sociedad” tiene que ver con los crímenes contra las mujeres, porque estos son el diagnóstico del “lamentable estado de la procuración de justicia y del respeto a los derechos humanos”.
En el editorial del semanario Desde la Fe, la Arquidiócesis, que encabeza el cardenal Norberto Rivera, resalta que la violencia de género crece de forma “alarmante, invisible, y que impacta directamente contra la célula fundamental de la familia”.
Con el título Feminicidios, crímenes impunes, el texto precisa que la violencia hacia las mujeres se ha elevado de manera drástica y detalla que en 2016 la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) dio a conocer el diagnóstico de la violencia contra las mujeres a partir de las leyes federales y de las entidades, en donde se afirma que “la violencia contra las mujeres, ejercida en sus distintos tipos y modalidades, encuentra su origen en la discriminación por razones de género como una condición sociocultural persistente en las sociedades”.
Señala, además, que de acuerdo con cifras del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, seis mujeres pierden la vida diariamente en México bajo circunstancias violentas, y que entre 2012 y 2013 fueron asesinadas casi 4 mil de ellas.
El editorial menciona que el Estado de México, entidad en donde se celebrarán comicios próximamente, entre 2011 y 2013, casi 850 mujeres fueron asesinadas; sin embargo, la alarma creció durante el periodo comprendido entre 2013 y 2015, cuando cerca de 2 mil mujeres fueron ultimadas y mil 500 desaparecieron.
“La mayoría eran adolescentes, de entre 15 y 18 años de edad. Estas cifras de escándalo, por supuesto, no importan a las autoridades, pues las muertas y desaparecidas no votan”, señala.
La Arquidiócesis destacó que la CNDH anunció que en siete estados se ha declarado la alerta por violencia de género y en otras 14 entidades se estaría llevando a cabo el procedimiento de solicitud, pero esto no es suficiente.
“Llama la atención del caso de Morelos donde, por cierto, todos los poderes se han confabulado para atacar y perseguir al obispo por tener el valor de denunciar la violencia y la corrupción que hoy por hoy son ya insoportables, estado donde este drama crece con desmesura, lo que provocó que el 10 de agosto de 2015 se generara dicha alerta; sin embargo, las mujeres siguen indefensas. Algunas organizaciones civiles han denunciado otra incapacidad total del gobierno de Morelos para frenar estos horrores, pues las medidas tomadas son francamente inútiles: cada cinco días, una mujer es asesinada”, denuncia el texto.
El artículo concluye que “ser mujer en México es sinónimo de desigualdad. Pese a que se han fomentado políticas públicas de defensa de sus derechos a través de modernas legislaciones, todavía encontramos situaciones que nos deberían avergonzar como sociedad”.