San Nicolás de los Garza, N.L.-
La estudiante de Ingeniería Aeronáutica en UANL, Laura Guadalupe Guajardo Villarreal, viajará a la NASA en otoño para participar en el International Air and Space Program 2022; recibirá entrenamiento de astronauta y aspira a desarrollar un instrumento que pueda ser enviado al espacio.
En el 2019, Laura Guadalupe asistió a la Feria Aeroespacial México – que se inauguró en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles- y ahí supo que la NASA lanza una convocatoria para estudiantes universitarios de carreras STEM para participar en un programa aeroespacial.
Desde entonces, aplicar a esta convocatoria se volvió un objetivo para la joven que reside en el municipio de Salinas Victoria. Es estudiante del séptimo semestre de Ingeniería Aeronáutica en la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) y tiene 21 años.
“Gente de la Agencia Espacial de México nos explica los detalles de esta invitación de la NASA y entre los requisitos solicitan que presentemos un proyecto en el que nosotros solucionemos una problemática actual en la industria aeroespacial.
“Para ese año no tenía nada preparado, así que, desde ese momento, hasta este año, es que he estado realizando mi proyecto de investigación”, compartió la alumna de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME).
Laura trabajó un proyecto que tituló “Los sistemas de propulsión sostenibles en la industria aeroespacial”, material que subió a la plataforma que la NASA tiene para que los interesados se registren. Ya solo le quedaba esperar el resultado.
META AMBICIOSA
La estudiante de FIME tenía muy claro que su proyecto de investigación tenía que ser fuerte, pertinente y bien argumentado. Así que le apostó a la preocupación que actualmente existe a nivel mundial sobre el tema ambiental.
“Cuando me dicen que tengo que solucionar una problemática decidí investigar acerca de los combustibles que se utilizan actualmente (en la industria aeroespacial), creo que todos hemos visto esos despegues de las aeronaves espaciales donde se forman estas nubes.
“En el proceso de combustión actualmente se libera monóxido de carbono, que es el contaminante principal en la atmósfera, y mi proyecto trata de la sustitución con un compuesto químico que es el etanol”, explicó.
Luego de aplicar a la convocatoria pudo ver en línea que había sido aceptada. Ella se integrará el 14 de noviembre a un grupo de 60 estudiantes que estarán durante una semana en la NASA.
“Allá la competencia se desarrolla durante una semana. Nos van a simular la anti gravedad, clases de buceo y entrenamientos que llevan los astronautas, para después plantearnos una problemática que deberemos resolver. Para trabajar en ese proyecto nos van a dar archivos que han recabado en anteriores misiones, como fue la misión Apolo en la luna o la misión robótica Marte”, dijo la estudiante.
Para este certamen, los estudiantes provenientes de diversos países del mundo se integrarán en grupos de cinco personas; buscarán resolver el problema y el proyecto ganador tendrá una gran recompensa.
“Ellos nos plantean una misión y tendremos que resolverla por equipos que se conformarán por compañeros de diferentes países, hasta ahora he visto confirmados jóvenes de Brasil, Estados Unidos, India, Ecuador, Colombia y México. El proyecto ganador será enviado al espacio”, compartió.
Laura es una joven con mucha iniciativa, ambición académica y con una visión muy clara de sí misma en el futuro.
“Desde el principio que apliqué sabía que lo iba a lograr, soy muy segura de las capacidades, de todas las herramientas que nos da la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica de la UANL.
“Mi sueño es viajar al espacio, llegar a trabajar dentro de la ingeniería en la Estación Espacial Internacional y siento que estas oportunidades son puertas que se me están abriendo para poder lograr mi meta”, dijo convencida.
LA CIENCIA NO TIENE GÉNERO
De niña, Laura tenía muchas interrogantes acerca del universo.
“Desde chiquita me hacía estas preguntas, que creo que la mayoría de los niños nos hacemos, porqué están las estrellas en el cielo, porqué hay tantas, qué pasaría si pudiéramos llegar a la luna”, recuerda.
Sin embargo, advierte que estas preguntas conforme las personas van creciendo se van dejando a un lado y muchos sueños se quedan solo en eso.
“Siempre hay quienes hacen comentarios negativos como ‘esto no es para algunas personas’, ‘aquí en México no hay donde desarrollarte’ y te van apagando ese sueño, pero siempre he estado con la motivación.
“Mi mamá siempre me ha dicho ‘si tú lo puede soñar o pensar, lo puedes hacer’ y aquí vamos, en el camino”, dijo orgullosa.
Las estadísticas poco favorables para las mujeres universitarias que cursan carreras STEM (física, química, biología, biotecnología, astrofísica, medicina; informática, telecomunicaciones, análisis de sistemas, robótica, ingeniería electrónica, eléctrica, mecánica), tampoco asustaron a esta alumna de la UANL.
“Según datos de la UNESCO, solo el 30 por ciento de los estudiantes que se gradúan (de las carreras STEM) son mujeres, pero siento que es más un tema cultural, algo que se va inculcando.
“Pienso que realmente no tiene género la ingeniería y la tecnología en general, cualquier persona puede aplicar y que hombres y mujeres tenemos las mismas capacidades”, señaló Laura, convencida.